Hay personas tan envolventes que no necesitas pensar si darles tu confianza o no. Se la ganaron, se la ganaron desde hace mucho tiempo pulso a pulso contra agua y viento respaldandote de una manera insignificante que día a día hace aumentar la sonrisa imaginaria dentro de mi cabeza cuando sucede.

¿Qué puede salir mal después de tantísimo tiempo confiando, creyendo que era para siempre de tal manera que no existía preocupación alguna sobre ello?

Yo desde luego no lo entiendo ¿Cómo se puede fallar a la persona que te ha visto crecer y ha estado a tu lado desde hace mucho? Bien, yo os lo diré; por un falso interés.

Sí, y es que a veces surgen estrellas en el cielo que brillan más que las demás, que duran meses, días, o segundos pero hacen ignorar el resto de "eternas" estrellas.

Comienzas a olvidar, a pasar, a ignorar, a quedarte sordo, a quedarte ciego...

Y en busca de la explicación solo obtienes una retaíla de excusas a cada cual menos creible en la que aparece: Por lo menos queda nuestro maravilloso pasado...¿Lo ves?

No, yo como tú, me he quedado ciego. Y no veo, ya no veo nada.



Leave a Reply